Benjamín Fulford
El Ultimátum - Parte 1



El Ultimátum: Benjamín Fulford - Parte 1
Tokio, Japón, Febrero del 2008


Shot, edited and directed by Kerry Cassidy and Bill Ryan


Pinche aquí para acceso a los medios disponibles
(Continúa en la Parte 2 y la Parte 3)


Benjamín Fulford (BF): El Sr. Takenaka me dijo que se vio forzado a hacerlo porque los EEUU le amenazaron con atacar a Japón con HAARP si rehusaba, ¿sí?

Kerry Cassidy (KC): ¿Y cuál hubiera sido el daño? Díganos que significaba eso para Japón.

Fulford: Un Terremoto.

… Así que le pregunté: ¿Es cierto? (Lo tengo grabado también) Dijo: Sí. Para poder proteger el medio ambiente necesitamos reducir la población a 2 billones. La guerra sencillamente no lo hace, por lo que vamos a tratar de usar las enfermedades y la hambruna.

… Uso la palabra “Rockefeller” como sinónimo del grupo de familias aristocráticas hereditarias – el grupo Americano versus el Europeo. Por ejemplo, los Bush forman parte de ello.

… Tenía dos anillos [Levanta la mano derecha en un puño] Uno era la representación de la máscara del diablo con dos cuernos y [levanta la mano izquierda en un puño] el otro parecía un anillo de matrimonio. Hizo así – [muestra a la cámara el puño derecho mientras levanta la mano con la palma abierta] - tenía el emblema de los masones [en la palma de la mano]. Luego dijo: Estos cuernos con un poquito de veneno… me tocas y eres hombre muerto. Me dijo que es un Ninja, lo que quiere decir un asesino profesional.

… Me dijo: Sr. Fulford, si quiere ser un periodista delator, adelante, séalo, pero morirá a la edad de 46 años. Sin embargo, [entregándome un distintivo masón] dijo: Si no, tiene una alternativa. Puede convertirse en el Ministro de Hacienda de Japón. ¿Está bien? De modo que me estaba ofreciendo que escogiera entre la muerte y el empleo de Ministro de Hacienda.

… Así es como lo describimos. Estamos robándole el dinero a esa gente pero, usted sabe, no vamos a matarla. Dijo que la población del Japón sería reducida a 70 millones. Permitirán que vivan 70 millones. Pero necesitan unos 500 millones de asiáticos para que continúen haciendo juguetes y cosas así. Estaba describiendo un genocidio.

… Me imagino que muchos de la misma élite… Estoy seguro que les sucede al Sr. Obama y al Sr. Clinton y a todos los de la alta jerarquía de la política estadounidense, senadores, quienes sean. Algún día les dan el mismo tipo de ultimátum: Muerte o cooperación – o se une a nosotros o muere. Así es como se las arreglan para controlar a los EEUU y esclavizar a su gente.

… Estaba en lo que llamo mi gran momento “Mata a Bill”. Hay una escena de la película “Mata a Bill” donde dos mujeres se pelean con espadas. Parecía que sería una larga y fea lucha. No se sabía quién sería la triunfadora. ¿Correcto? A una de las mujeres [la mala] le faltaba un ojo y tenía un parche. De repente, una de las mujeres le sacó el otro ojo y la dejó ciega, terminando la pelea.

Kerry: Sí. Increíble. Muy, pero muy grafico.
Fullford: Muy grafico y pensé: ¿Ajá, porque no escoger como objetivo el Ojo de la Pirámide?
Porque la mayoría de los occidentales no saben siquiera que existe.

… Me di cuenta que la Sociedad tiene 6.000.000 de socios y la Sociedad Secreta occidental como máximo tiene 10.000. Por lo tanto, eso significa 6.000.000 contra 10.000. Repentinamente caí en cuenta: ¡Bueno, eso es! Hemos pillado a esos bastardos.

… Me convertí en el primer occidental en unírseles en 500 años.

Kerry: ¿Tenía un guardaespaldas entonces? ¿Contrató a alguien?

[Fulford suspira] No. Si necesitara un guardaespaldas, sería demasiado tarde. Hay que actuar en el nivel superior; si realmente quisieran dispararme, lo harían. Tienes que hacer que ellos no quieran dispararte.

… La clave de la democracia es que la gente controle su dinero, no la elite secreta. El dinero es lo que cuenta. Si pierdes el control de tu dinero entregándoselo a gente que no puedes ver, eres un esclavo. Eso hay que recordarlo. Nunca, jamás, permitan a una elite de poder secreta tomar control de vuestro dinero.

…Ustedes saben, si van a tratar de matar a billones de personas, vamos a tener que matar, si es necesario, a 10.000 personas para evitar que eso suceda. Y ya todo está arreglado.


benjamin fulford

Inicio de la entrevista

Soy Kerry Cassidy de Proyecto Camelote y estamos verdaderamente complacidos de tener con nosotros hoy a Ben Fulford, antiguo Jefe de Agencia de la sucursal de Asia-Pacífico de la revista Forbes, algo fabuloso. Según tengo entendido estuvo allí durante seis años.

BF: Sí, aproximadamente.

KC: ¿Ha estado viviendo y trabajando como periodista en Japón durante 20 años?

BF: Aún más. Llegué por primera vez en 1980. Asistí a la universidad aquí.

KC: Oh, eso no lo sabía. Así que estudió en la universidad de Tokio, ¿o cómo se llama?

BF: Quizás deba hacerle un resumen de mis antecedentes. Nací en Ottawa, Canadá, en 1961 y a los seis meses de edad mi familia se mudó a Cuba. Mi padre era un diplomático canadiense.

KC: Muy bien. Sí.

BF: Castro lo botó porque estaba ayudando a escapar a los refugiados. Después viví en Méjico hasta los ocho años. Y de 8 a 16 viví en Canadá. Estudié en una escuela francesa. De modo que crecí hablando 3 idiomas.

KC: Por lo tanto, habla español.

BF: Además de inglés cuando niño, luego francés. A partir de la escuela secundaria, sólo francés.

KC: Muy bien.

BF: Mm… Entonces, yo vivía el final de la era jipi y recibía el eco del pasado sobre lo que era la sabiduría de la calle comparado con lo que aprendíamos en la escuela. Y lo que se decía era que si ibas a la universidad te harían un lavado de cerebro para convertirte en un consumidor y que habia algo que no estaba bien en el mundo que los adultos habían creado. Era entonces una especie de Zeitgeist. ¿Correcto? decidí escapar porque si iba a la universidad me lavaban el cerebro. Me fui al Amazonas y viví con los indios Shipibo.

KC: ¿Cuántos años tenía entonces?

BF: 17 años.

KC: ¿Cierto? Es decir, hacer algo así requiere temple… ¡El Amazonas!

BF: Bueno, en realidad, habían sido caníbales.

KC: ¿Sí? Pero…

BF: Bueno, sí, muchas experiencias espeluznantes – una ametralladora apuntándome a la cabeza, casi me come un oso, me persiguieron los lobos, todo ese tipo de…

KC: Así que fue al Amazonas. Tenía 17 años y no iba a la universidad. ¿No se molestaron sus padres por ello?

BF: Bueno, ¿qué podían hacer? Quiero decir, me fui, desaparecí. Así que, ustedes saben…

KC: ¿Así pues, desde joven fue muy independiente?

BF: Sí, creo que en cierta manera… Pasaba las noches afuera a solas en el bosque desde los 12 años y así por el estilo. Mi opinión es que sólo estaba verdaderamente ansioso por lanzarme al mundo.

KC: ¿Su apellido Fulford…? Lo conocemos, por ejemplo, su abuelo fue un Fulford muy bien conocido. ¿Era entonces su familia reconocida o no como parte de la clase gobernante del Canadá?

BF: Sí, seguro. Es decir, mi bisabuelo fue lo que sería hoy en día un billonario y un senador. Además, fue miembro del parlamento durante unos 20 años y mi padre, embajador en diferentes países.

KC: ¿Por lo que debió haber sido considerado algo así como “un niño de la élite” de entonces?

BF: Seguro. Al mismo tiempo tuve una educación inusual porque desde la niñez se nos enseñó a ser muy compasivos. Las cosas que vi en Méjico cuando era niño me perturbaron mucho. Me refiero a la pobreza extrema. Nunca se me olvidará que cuando tenía 7 años conocí a un niño en la calle. Jugábamos y hablábamos. Era tan alto como yo y más o menos del mismo nivel mental pero resultó ser que tenía 12 años.

Le pregunté a mi madre: ¿Cómo puede ser? Y ella me respondió: Bueno, no tiene suficiente alimento. Yo le dije: ¿Cómo se ha podido permitir que pase? Está sucediendo hoy día a billones de personas. No se les permite desarrollar su potencial humano. No reciben una educación adecuada, ni nutrición apropiada, ni servicios médicos, NADA. Me refiero a que es una vergüenza que se permita que esas cosas sucedan.

Al mismo tiempo, cuando estaba en el Amazonas la selva virgen era bella pero me dijeron que en unos 5 años desaparecería porque venían los cortadores de arboles. Así que dije: ¿Bueno, que es lo que hay por ahí que está destruyendo la naturaleza y dejando que tanta gente sufra? ¿Cómo puede ser? Se me hizo evidente que (y esto es lo que se logra en un mundo perturbado, en la calle, en la clase pobre) hay algo equivocado en la manera como los occidentales están gobernando el planeta.

Por lo tanto, finalmente decidí después de unos tres y medio años de viajes y aventuras… para compensar por no haber ido a la universidad, leerme todas las escrituras sagradas: el Corán, la Biblia, Confucio, Lao Tzu, el Bagavad Guita, etcétera, etcétera.

KC: Grandioso. ¿De modo que estudió filosofías asiáticas antes de ir a Japón?

BF: Bueno, asuntos místicos. Ustedes saben, meditación y…

KC: ¿Me refiero a cosas como el I Ching? ¿Lo ha leído?

BF: Seguro, sí. Todo ese tipo de cosas. Además, se decía en la calle que algo tenía que venir del Este que ayudara a la sociedad. Por lo tanto, decidí finalmente ir a la universidad en Japón. Las alternativas eran India, China y Japón y por varias razones escogí Japón.

KC: ¿Sabía entonces que estudiaría economía? Asumo que esa fue, quizás, su especialización.

BF: Sólo quería aprender. No pensaba en especializaciones o empleos. De hecho, estudié todas las asignaturas que habían: economía, sociología, antropología, matemáticas, biología, lo que fuera. Cursé por lo menos hasta el tercer año, haciendo todos los cursos, en todos los temas.

KC: ¿Logró graduarse con diploma?

BF: Finalmente obtuve el diploma de la Universidad de British Columbia en Estudios Asiáticos, especializándome en China.

KC: Mm. Así que fue a British Columbia.

BF: Estudie en la universidad Sofía en Japón durante tres años y medio. Como dije, tomé el equivalente a unos ocho años de cursos de pre-grado, muchos más de los que necesitaba.

KC: ¿Cómo aprendió el japonés?

BF: Bueno, de dos maneras. Hice un curso intensivo de dos meses en la Universidad de British Columbia y después llegué a Japón. Pase tres días en una escuela japonesa y dije: Esto es inútil. Me conseguí un empleo como barman en un bar manejado por un mafioso.

De 9 p.m. a 5 a.m. Era la clase de sitio donde había peleas y algunas veces la gente llegaba desnuda; básicamente, era como de la categoría más baja que se pudiera encontrar en Japón. Pero la mejor parte acerca de tener el empleo en el bar era aprender el idioma porque los borrachos repiten la misma cosa una y otra vez. ¡Hasta que finalmente uno les entiende! [Kerry se ríe]

También fui a lo que se llama la “Universidad Futon”. Tuve una novia que no hablaba inglés.

KC: [Se ríe] Oh, muy bien…

BF: Así que fue una combinación de ambos. Yo hablaba algo así como una mezcla del lenguaje de un mafioso y un travesti, o muy afeminado o de muy bajo nivel callejero.

KC: ¿Es así como está describiendo su habilidad para hablar el idioma japonés? Es divertidísimo.

BF: Después de unos 6 meses pude, más o menos, llevar una conversación completa.

KC: Vaya. Eso es magnífico. ¿Escribe algo de japonés? ¿Puede leerlo?

BF: He escrito creo que más de una docena de libros en japonés, varios de ellos son un éxito en ventas.

KC: Oh, está bien. Pero debo saber – ¿se consiguen en inglés? Porque nos gustaría leerlos.

BF: No. No. En realidad, no he… [Fuerte expulsión de aire] Después que dejé Forbes, deliberadamente me cambié al idioma japonés hace unos años porque sabía que estaba enfrentándome a algo peligroso y no entendía muy bien que era.

KC: Oh, vaya.

BF: Por ejemplo, recuerdo que me alertó Makiko Tanaka, el antiguo Ministro de Relaciones Exteriores y la hija de Primer Ministro, Kakuei Tanaka, que cayó con el escándalo de Lockheed. Ella nos dijo: Mire, si comienza a entrometerse en ese asunto se va a buscar la muerte. Así que sabía que habia algo muy peligroso pero sin saber qué exactamente. De modo que en la clandestinidad comencé a escribir en japonés.

Bill Ryan, fuera de cámara: Para entonces, Ben, el asunto al que se refiere… ¿En ese entonces, en qué tipo de asunto se estaba involucrando que hizo que se le pusiera sobre aviso?

BF: Cuando estuve en Forbes escribí varias historias acerca de la mafia Yakusa y como resultado me gané varias amenazas de muerte. Al jefe de la agencia de Forbes en Moscú, Paul Klegnikov, le dispararon diez veces frente a su casa. Le llevaron al hospital y cuando entraron al ascensor, éste se detuvo durante 8 minutos. Allí es donde murió.

KC: Vaya. ¿En qué año sucedió eso? ¿Sabe cuándo aproximadamente?

BF: Creo que cinco o seis años atrás.

KC: ¿Para entonces, estaba trabajando para Forbes o ya se habia ido?

BF: Trabajaba para Forbes. Él era el tipo de Moscú, yo era el de Tokio. Le conocía.

KC: Está bien.

BF: Poco más o menos para ese tiempo, varias personas del periódico Osaka y de la televisora CBS se me acercaron para decirme que el líder del sindicato del crimen Goto estaba en el Hospital Universitario Berkeley UCLA, por un trasplante de hígado. Ahora bien, eso hizo que surgieran muchas preguntas interesantes. Una es, ¿Cómo es que un conocido mafioso y criminal obtiene una visa de los EEUU? ¿Y por qué un tipo de 70 años de edad consigue llegar al tope de la larga lista de espera por trasplantes de hígado?

Por lo tanto, comencé a pensar: Bueno, quizás esté haciendo algún trabajo para la CIA o algo parecido.
Iba a escribir sobre eso en Forbes pero antes llamé a una fuente mafiosa muy antigua que conocía y le hablé al respecto.
Me dijo: Oye, si escribes eso te van a convertir en paté de pescado.
¡¿Qué?!!! Yo no respondo a amenazas y nunca me amenace, dije.
Dije: Soy un periodista muy conocido. Si me mata causará muchos problemas.
No le mataremos, simplemente le desapareceremos. Dígale adiós a su novia y eso es todo. Nunca más le verán.

Y después nombró a un par de periodistas que desaparecieron.

KC: Vaya, hombre.

BF: Y lo recuerdo. Por ejemplo, habia un tipo que escribió acerca de cómo la mafia Goto estaba vendiendo… La secta religiosa Aum Shinrikyo estaba importando anfetaminas de Corea del Norte y vendiéndoselas a la mafia Goto. Desapareció después de escribir unos cuantos artículos al respecto. De igual manera…

KC: ¿Se le encontró alguna vez?

BF: No. Oh, no. Un montón de ellos desaparecieron. Y muchos periodistas japoneses me dijeron: La única razón por la que sigues con vida es porque eres blanco. Si nosotros tratáramos de escribir sobre el mismo tema, estaríamos muertos.

Por lo que yo sabía que habia algunas personas peligrosas. Por cierto, el mafioso ese me dijo cuando le hablé sobre el asunto del trasplante: Mira, no podré volverte a hablar si publicas esa historia. Y yo pensé: Está bien. Este tipo es una fuente muy antigua y me ha dado mucha información valiosa por lo que no quiero perder este contacto por una historia. Decidí no escribirla pero hubo una especie de muy mal ambiente.

Después volé a Sakhallin…

KC: Perdón, ¿qué dijo?

BF: Sakhalin, en Rusia. Al extremo oriental de Rusia, donde tienen ahora todo el petróleo y el gas… Fui para hacer una historia. El representante local de esa mafia me estaba esperando y me llevó por los alrededores. Me llevó a un casino gigante con unos 400 chechenos parados al frente. Era algo de películas. Tenían todas esas armas, habían sido contratados por la mafia japonesa como guardaespaldas de sus casinos.

KC: Vaya. Chechenos.

BF: Chechenos, sí. Trabajando para los mafiosos japoneses. Hay montones de cosas que están sucediendo que sencillamente no se ven en la superficie.

KC: Bueno, nosotros acabamos de regresar de Moscú. Es un sitio fascinante.

BF: Bueno, en el Asia verá que realmente no hay una línea divisoria entre mafiosos y gobernantes. Lo que hay es una continuidad. Por lo que casi se pudiera pensar de esos mafiosos como…

KC: Bueno, algunos dirían que eso es verdad, usted sabe, [Kerry se ríe] de los EEUU y de Rusia, y…

BF: Seguro. En los EEUU… Es decir, básicamente, una gran sección de la CIA es crimen organizado con respecto a lo que hacen. En gran parte son gente honesta tratando de defender su país pero hay grupos allí, ustedes lo saben y como todos saben – contrabandeando drogas y se involucran en todo tipo de crímenes.

KC: Correcto.

BF: Mm… Así que estaba sentado en un “club” y había un tipo sentado a mi lado. (No era como el que conocí en Tokio. Era un hombre de negocios de alto nivel.) El tipo era un pequeño truhán, peligroso. Ustedes saben, nada de agradable. Estaba sumamente tenso. Le dije: Escuche, quiero irme a casa. Él contestó: No, no, no puede. A usted le van a matar o algo así, ¿correcto? ¡Me di cuenta que me estaban tendiendo una trampa! ¡Me habían tendido una trampa para matarme!

KC: Ay, Dios.

BF: Tuve que pensar con rapidez. Le señalé a dos petroleros y le dije: Va a tener que preocuparse por usted mismo. ¿Ve a esos tipos? Son de la CIA y me respaldan. Además, tengo un documento que saldrá al público si algo me sucede que tiene una lista de nombres que les llevará a todos a la cárcel. Era un engaño total, ¿cierto? No tenía ningún documento y esos tipos eran solamente petroleros pero, ¿qué podía hacer?

El tipo simplemente se levantó (chasquea los dedos y hace un ruido indicando gran velocidad]… como un cohete, con el teléfono [hace como si tuviera un teléfono en la oreja] Tomé mi teléfono y llamé al jefe de la mafia para decirle: No estoy aquí para escribir acerca de sus asuntos con la mafia rusa y cosas por el estilo. Estoy aquí para escribir acerca de la industria petrolera. No le voy a causar ningún problema. Después regresó el tipo. Estaba relajado. Yo le dije: Muy bien. Buenas noches. Y eso fue todo. [Kerry se ríe]

Bill: Parece la secuencia de una película.

BF: Sí. Pero, en realidad, no dispararon… Aunque los chechenos sí le dispararon a mi colega. Eso fue después de lo que me ocurrió a mí pero…

Después que eso sucedió hice un documento que todavía guardo – en disco duro y en DVD con grabación de voz y video. Por ejemplo, un muy conocido primer ministro japonés ha asesinado a tres mujeres y tengo prueba de uno de esos asesinatos. Muchas cosas así.

Pero mi trabajo no es tratar de poner en evidencia a la gente. Eso no es lo que quiero. Ese fue sólo un seguro que tuve que crearme.

Ya no necesito de ese seguro porque ahora tengo a la sociedad secreta que me respalda, pero… Después, mi idea… No estoy tratando de poner al descubierto a nadie. Ya no estoy en ese nivel. Estoy tratando de salvar al planeta.

KC: Correcto.

BF: Así que ese asunto nunca verá la luz, probablemente jamás, básicamente mientras no me maten. Si lo hacen, habrá horribles repercusiones de todo tipo. Sin embargo, de nuevo, estoy tratando de lograr una situación que beneficie a todos ¿correcto?

¿Bien, regresemos ahora a cuando acababa de llegar a Japón? ¿Quiere que hable al respecto?

KC: Claro, sí. Pero sólo quería saber un poquito de lo que fue su experiencia en el Amazonas que en cierta manera descubrió. ¿Por ejemplo, qué significa para usted haber ido allí?

BF: Pensaba por ejemplo, un pez no conoce el agua hasta que salta [imita a un pez que salta del agua]. Por lo tanto, para entender la civilización uno tiene que abandonarla. Así que he intentado cosas diferentes.

En Amazonas sobreviven con pescados y bananas: bananas asadas y sopa de pescado. O sopa de bananas y pescado asado. O pescado asado y bananas asadas. Háganse la idea. Me cansé. Y dije: ¿Bien, porque no buscamos carne? Así que salimos de caza. Pasamos todo el día en la selva sin conseguir nada, sin cazar nada; regresamos hambrientos – no había nada para comer.

De modo que en la civilización perdemos esa conexión entre el trabajo, el alimento y la supervivencia. Hay tantas capas entre lo que es realmente obtener el alimento de la tierra y ponerlo en nuestras bocas que no nos damos cuenta a veces.

Lo otro es que esa gente es mucho más sencilla para comunicarse. Son directos. Dicen exactamente lo que piensan. Así que uno entra en una habitación y lo primero que piensan es: Ajá, estás gordo y lo dicen. Mientras que en la civilización es mucho más complejo. Te dicen: Oh, te ves sano. O algo así. No tratan de, ustedes saben…

KC: La máscara no es tan gruesa.

BF: Sí. Lo otro es que esa gente fueron antiguos caníbales, por lo tanto los ancianos cuando eran jóvenes comían carne humana. Me explicaron que en la estación de las lluvias no habia suficiente pesca y la única manera de obtener proteínas era comiéndose a los vecinos. En la actualidad sobreviven en la estación de lluvias comiendo pescado enlatado. [Kerry se ríe]

KC: Está bien. ¿Pero, llego allí por sí mismo? Tengo que saberlo.

BF: Sí.

KC: ¿Completamente solo?

BF: Hice autostop y a bordo de un bote de alguna manera llegué a la aldea.

KC: Increíble. Vaya, debe de tener una increíblemente fuerte personalidad…

BF: Bueno, había leído Las enseñanzas de Don Juan. ¿Correcto? Yo buscaba un curandero, quería ser su aprendiz.

KC: Entiendo.

BF: Finalmente encontré a un curandero e hice mi aprendizaje en el Amazonas…

KC: Así que está entrenado en la magia.

BF: Sí. Puedo expulsar espíritus de los ríos y cosas así, si es necesario. Conozco varias hierbas y plantas…

KC: Correcto.

BF: Usé mucho esa que llaman Ayahuasca.

KC: Ah, esa es una droga que produce estados alterados, ¿correcto?

BF: Sí. En esos tiempos casi no habia nada escrito al respecto en inglés, ¿correcto? Les digo, tenía que subir hasta la parte más alta del rio Ucayali y buscar a los indios Shipibo para encontrarla. Por lo tanto, se pueden imaginar mi sorpresa cuando años más tarde la vi a la venta en las calle como droga legal, [se ríe] lo que no debería ser.

KC: ¿Quiere decir aquí en Tokio?

BF: ¡Sí!

KC: Muy bien. Eso es interesante.

BF: Bueno, no hay ninguna ley específica en su contra. Pero no importa.

KC: Vamos a adelantarnos: Está en Tokio, ha ido a la universidad. ¿Solicitó trabajo en Forbes entonces?

BF: No, mi primer empleo… Bueno, yo quería escribir una “teoría para todo.” Pero, así no se pueden pagar las facturas, por lo que el primer empleo que conseguí fue con un grupo llamado Knight Rider que era parte de la cadena de diarios Knight-Rider.

KC: Sí.

BF: Pero con sus hilos financieros. De modo que tenía que reunirme con los Ministros de Hacienda y directores del Banco de Japón y gente por el estilo. Escribía todas las noticias del mercado. Así que mis historias movían el dólar, o el yen, o los productos básicos todas las semanas, hacia adelante y hacia atrás. Era realmente asombroso observarlo. Lo que aprendí allí como reportero de finanzas es que, realmente, la finanza es psicología en masa. Es la psicología moderna. Y esa fue una muy interesante lección que no se aprende en el club de la escuela.

KC: ¿Así que para entonces aprendió sobre el poder de la palabra escrita, correcto?

BF: Bueno, es la información y como todos tienen esa historia que rastrean y le buscan la mas mínima oportunidad. Por ejemplo, si el Director del Banco de Japón dice: Bien, debemos reducir un poco las tasas de interés. Y [hace el ruido de una explosión de velocidad] todo se pone en movimiento. ¿Correcto?

KC: Correcto.

BF: O aún en el mercado de los productos básicos. Los rumores de que China va a comprar petróleo o algo parecido hacen que todo se ponga en movimiento.

KC: Pero dígame algo acerca de sus antecedentes. Porque escuchamos una entrevista en la radio canadiense y usted realmente demostró una comprensión increíble sobre la economía mundial y de lo que la hace moverse. Y estoy preguntándome - ¿Dónde aprendió todo lo que sabe al respecto?

BF: Bueno, por supuesto, asistí a todas las clases de la universidad, ustedes saben, de economía y todo eso. Pero, básicamente, durante más de 20 años he estado en ello, escribiendo al respecto. Me refiero a que todo el mundo viene a Tokio… presidentes y primeros ministros, ministros de hacienda. Están los G7 y todo ese asunto…

KC: Los G7 están aquí ahora mismo, ¿es eso lo que quiere decir?

BF: Sí. He estado siguiéndoles, en los niveles más altos, durante más de 20 años. He entrevistado a mafiosos, primeros ministros, ministros de hacienda, presidentes de compañías petroleras, presidentes de pequeñas compañías – más de 20 años, casi 30, entrevistando a todo tipo de gente.

KC: Por lo que me imagino que solo las entrevistas son una educación en sí mismas – es lo que vemos.

BF: Sí, además de ser periodista. Uno se da cuenta que el trabajo es filtrar. Uno absorbe enormes cantidades de información y busca las pepitas que son fáciles de comprender y entregar su esencia; y eso se le da al público. Así que ese es el trabajo ¿sabe? Uno es un filtro de la información.

Bill, fuera de cámara: Pero hay otros periodistas de finanzas por ahí que sólo están remolcando la línea partidista. Y eso es categóricamente lo que usted no ha estado haciendo. Es un verdadero disidente de ese campo.

BF: Bueno, vean, es un nivel muy alto de propaganda. Les han hecho lavados cerebrales. Verdaderamente, no entienden, en esencia, de que se trata eso. Y ese es el truco. Tratan de confundir a la gente con matemáticas esotéricas y de cubrirlo con muchas palabras complejas. Así, ustedes saben, han inventado esos “derivados” que son tan complejos que la mayoría de las personas no llegan a entender lo que significan. Recuerdo que hace casi quince años, o más, hablaban de “Estructuras de Protección Delta” [dibuja con las dos manos la forma de una pirámide de arriba abajo]. Se meten en ese asunto y se ciegan.

Es casi como crear una confusión deliberada - porque en esencia es realmente muy sencillo.

La Economía es gente trabajando para ganarse el sustento. Y las finanzas son el proceso de decidir qué es lo que la gente va a hacer. Sin embargo, tratan de impedir que sepamos esto, especialmente en lo que respecta a finanzas.

Y esa es la raíz de los problemas del mundo hoy día.

KC: ¿Pero cómo fue que usted, como periodista de Forbes…? ¿Fue gradual la manera como…? Puedo imaginarme que si tenía el conocimiento que tiene y esa perspectiva… Como periodista, ¿no le rechazaban en Forbes diciéndole “No, no escriba esto,” o “No escriba eso”?

BF: Bien. Quizás deba decirle… Le mostraré como descubrí cosas en orden cronológico. Esa es la manera más fácil.

Lo primero que noté en Japón fue que no todo es lo que parece, como cuando vi a algunas personas haciendo fila frente a una pequeña caseta. Y pregunté: ¿Qué están haciendo? Estamos cambiando nuestros premios por efectivo (del pachinko, que es una especie de tragamonedas] Y uno se entera que tienen una INMENSA industria del juego, con avisos de neón gigantes por todas partes, lo que en esencia es ilegal. Por ejemplo, no importa cuán duro trate, le va a ser difícil perder más de mil dólares diarios en esos lugares.

Por lo tanto, hay todo un sistema fuera de la estructura legal que conecta a los policías, a los mafiosos y a los hombres de negocio; todo fuera del llamado “aparato legal.” Esto fue algo que me hizo dar cuenta de que hay algo diferente en este país. Tienen una Cámara de Senadores y una Cámara de Diputados; tienen las Cortes y todo lo demás. Estructuralmente son iguales. Pero, en esencia, son totalmente diferentes.

Lo que aprendí fue que el llamado “sistema democrático legal” es la “fachada” de una VERDADERA estructura de poder muy diferente.

KC: Sí.

BF: Esto es algo que aprendí de a pedacitos. Primero fue el pachinko. Un amigo mío fue golpeado por un mafioso al frente de una caseta de policías. Fuimos a la caseta de policías y el policía dijo: No deberían buscar pelea con mafiosos. Así es. De nuevo, me dije: Eso es extraño. Pero de nuevo pensé que sólo se relacionaba con el juego y la prostitución, lo que realmente representa una especie de zona gris en todas partes.

Ahora bien, no pensaba mucho en eso hasta… Como periodista de finanzas en el servicio de cable es muy importante ser rápido. Si le ganas a la competencia 20 segundos se considera una primicia. Por lo que hay que encontrar dónde emana el poder. Por ejemplo, hablando con los burócratas del Ministerio de Agricultura, decían: Bueno, si quiere saber lo que realmente está sucediendo hable con el Sr. Kato Koichi.

Era un poderoso traficante de influencias del Partido Liberal Democrático. Y era el hombre que tomaba las decisiones entonces. De modo que llegué a conocerle. Una vez me llamaron para ser el sustituto de última hora de uno de sus discursos. Llegó y dio su discurso causando mucha impresión. Seguidamente recibió un gran sobre grueso lleno de dinero. Me dije: Ah, la política… ¿Lo saben? [Se ríe]

Luego, pensé que el Ministro de Hacienda era la VERDADERA fuente de poder en Japón – eso es lo que la gente cree – contaba con la burocracia MÁS poderosa. Sin embargo, cuando comencé a hablar con la gente del Ministerio de Hacienda, finalmente me dijeron: Si realmente quiere saber lo que sucede debe hablar con Valores Nomura. Estábamos entonces en los años 80. Ahora es diferente. Pero en los años 80 durante la burbuja, Valores Nomura tenía una lista de “VIP” de 5.000 personas. Además, tenían dos jefes, el gran Tabuchi y el pequeño Tabuchi, no eran familia pero luego se les vinculó a una gran mafia.

Por tanto, le prestaban un par de millón de dólares a todos esos periodistas, políticos, los que mueven y agitan las cosas a alto nivel, diciéndoles: Compren esas acciones. Luego, llamaban a cada vendedor del país y a todos sus contactos en los periódicos y les decían: Esas son las acciones que deben comprar ahora. Y toda ama de casa, comerciante y medico compra las acciones, el precio sube y los VIP venden. Así es como controlan. Es un asunto político.

KC: Dice que hoy día es diferente. ¿Qué tan diferente?

BF: Bueno, son diferentes actores, diferentes formas de pasar el dinero. De hecho, esa es la clave del problema que tenemos entre manos. Pero iremos paso a paso porque así es más fácil para comprender la historia completa.

KC: Sí.

BF: Así pues, me volví muy cínico con respecto a Japón pero el factor decisivo para mí fue el Escándalo de la Casa de Préstamos Jusen. Era un grupo de compañías que prestaba sólo para la industria inmobiliaria. Y la primera vez que usaron dinero de los contribuyentes de los impuestos fue después que explotó la burbuja japonesa.

Por cierto, en 1992 el gobierno japonés ya sabía que tenían 200 trillones de yenes en mala deuda. Aunque los periódicos sólo decían que eran 2 o 3 trillones. No fue sino hasta más de 10 años después que, finalmente, admitieron la cifra completa. Y eso es lo que está sucediendo en los EEUU ahora mismo. Solo que no van a tener 10 años porque no los prestaron de otros americanos. Los tomaron prestado del resto del mundo. Así que vamos a ver ENORMES cambios en el futuro. Pero ya hablaremos de eso.

KC: Sí.

Bill, fuera de cámara: Hay un asunto que me gustaría resaltar, porque recuerdo que usted le dijo a Rense que sentía, era su opinión, que la deuda de los EEUU era de 120 trillones de dólares. Revisé ese dato y me pregunto de donde salió ese monto. Por lo que me gustaría preguntarle eso.

BF: Ahora mismo le puedo decir: 66 trillones de dólares salen de un artículo del Prof. Killborn que fue publicado por la agencia en San Luis del Consejo de la Reserva Federal en el año 2.005. Esa es la cantidad que se les debe a los ciudadanos americanos, ustedes saben, dinero que prometieron pagar en Medicaid, Seguro Social y cosas por el estilo. Está en ese estudio. Pueden obtenerlo. Ahora bien, los otros 53 trillones de dólares son los dólares que están en circulación fuera de los EEUU. Así que súmenlo y tendrán los 120 trillones de dólares.

Bill: 120 es una gran suma.

BF: ¡Sí! Y no sólo eso, con un PBI de 13 trillones de dólares. Ustedes saben, allí es donde sale a flote toda la trampa. Pero, más adelante veremos eso.

KC: Sí. Así que hablábamos de inmuebles…

BF: Muy bien. Aquí está el asunto. Para entonces estaba trabajando en Nihon-Keizai Shimbun. Es la contraparte del Wall Street Journal. En idioma japonés y es el número uno de los periódicos de negocios/finanzas que tienen, no tienen parangón. Estaban hablando sobre verter decenas de billones de dólares del dinero de los contribuyentes para sacar de apuros a esas compañías. Además, habían unas discusiones extrañas acerca de… ah… “la responsabilidad del prestatario.” La responsabilidad del prestatario… ¿Qué está pasando aquí? Así que les confronté para preguntarles: ¿Bueno, quienes son los prestatarios?

Lo que averigüé fue que – mis fuentes son personas en el Banco de Japón y en varias otras agencias, como las agencias de calificación crediticia – más de la mitad de los préstamos fueron hechos a la mafia, a la mafia Yakuza. Esto a mi me pareció algo asombroso. El caso es que el gobierno usa decenas de billones de dólares del dinero de los contribuyentes para sacar de apuros a compañías que prestan dinero a la mafia – compañías todas dirigidas por antiguos empleados del Ministerio de Hacienda. Ahora pueden ver la conexión entre los empleados del Ministerio de Hacienda, los políticos y los mafiosos. Están usando el dinero de los contribuyentes para dárselo a los mafiosos, ¿entienden?

Por lo tanto, publiqué eso en el Nikkei inglés y hubo una reacción COLOSAL. Más de 400 periodistas extranjeros y de revistas escribieron historias similares – La mitad de los préstamos inmobiliarios eran de los mafiosos. ¿Correcto? Después, Newsweek escribió una historia casi idéntica a la mía. Subsecuentemente, Nikkei, mi propio periódico publicó: “De acuerdo a Newsweek, la mitad de los préstamos de las compañías Jusen fue otorgada a los Yakuza.”

Fui a ver a mi editor y le dije: Oye, yo escribí esa historia primero. ¿Por qué dijo “De acuerdo a Newsweek”? Me llamaron y me dieron el Premio del Editor más 50 dólares [Se ríe], diciéndome: Sr. Fulford, usted sabe, realmente no debería escribir cosas como esas. Simplemente no se hace y puede ser peligroso.

Después de eso comenzaron a vigilarme. Sólo me dejaron escribir las cosas que el gobierno anunciaba.

KC: Vaya. ¿Eso sucedió después de salió de Forbes? Escribía para el…

BF: Antes de que llegara a Forbes.

KC: Oh, antes de que llegara a Forbes. Está bien.

BF: ¿Entendido? Entonces comencé a darme cuenta que la prensa japonesa no era libre.

KC: Correcto.

BF: Resulta ser que habia un editor en Nikkei, el Sr. Otsuka, que se ganó un montón de premios por escribir acerca del escándalo Itoman… pero luego fue removido repentinamente a una extraña subdivisión fuera de los reportajes de negocios. Por lo que se llenó de sospechas y comenzó a seguir al presidente.

Averiguó que le prestaron algo así como cien millones de dólares a los mafiosos, dinero que nunca será pagado. El escándalo Itoman fue otro escándalo inmenso, cuando uno de los bancos japoneses más grandes, el Banco Sumitomo, básicamente había sido tomado por un sindicato criminal. En resumidas cuentas, eso fue lo que pasó. Es una historia larga y complicada, pero…

De cualquier manera, comencé a darme cuenta que los periódicos, los políticos, los burócratas y la mafia estaban todos juntos en algún tipo de estructura de poder deshonesta, muy diferente a lo que la gente veía en sus televisores o leyendo los periódicos. Me disgusté muchísimo cuando comenzaron a eliminar mis historias.

Por eso me fui de Nikkei. Trabajé por cuenta propia durante un tiempo para el South China Morning Post y un montón de sitios antes de lograr el empleo en Forbes. Al principio la gente de Forbes estaba feliz dejándome escribir acerca de la mafia. Escribí un artículo sobre Obras Públicas que tuvo como resultado una carta de protesta formal de la Embajada Japonesa en Washington. Me dije: Dios santo, puse el dedo en la llaga. ¿Correcto?

Y luego otra historia… Cuando finalmente estaban comenzando a limpiar la mala deuda con los bancos, me fui enterando de la muerte de todo tipo de gente. Por medio del suicidio o desapareciendo, lo que fuera. Aunque eso era atípico. Lo típico era lo que llaman el suicidio hara-kiri, que implica que hizo algo malo y se suicida para pedir excusas. Eran personas que iban a testificar, gente que iba a… sí… a enjuiciar a personas.

Por ejemplo, hubo un escándalo financiero y el presidente del Banco Dai-Ichi Kangyo, que forma parte de Mizuho, estaba por atestiguar. El día antes de la declaración, a las 11 p.m., su esposa salió de la casa y luego entraron cerca de 10 hombres vestidos de negro que apagaron las luces y luego se fueron. A la 1 a.m. regresó la esposa y le encontró muerto. Y dijeron que fue un suicidio. Ahora bien, eso se supo por la versión inglesa del periódico Yamiuri porque no llego a salir en la versión japonesa. ¿De acuerdo?

Para entonces yo habia hecho muchas conexiones con la mafia porque me di cuenta que para comprender lo que está sucediendo en las finanzas uno tiene que hablar con la mafia. De otra manera, es imposible saber lo que está sucediendo.

KC: Entiendo

BF: Seguidamente… habia un banco llamado el Banco de Crédito Nipón que luego pasó a ser el Banco Aozora. [Creo que ahora su dueño está en uno de los fondos periféricos de los EEUU. ¿Quizás, Carlyle? No lo recuerdo. Tendré que revisarlo) De cualquier manera, el director del Banco de Japón, el Sr. Honma, fue nombrado presidente. Dos semanas después le encontraron colgado y dijeron que fue un suicidio. Conocía a ese tipo desde que yo era el encargado de obtener las noticias del Banco de Japón. DE NINGUNA MANERA podía haberse suicidado.

Por lo tanto, le pregunté a mi amigo mafioso. Me dijo: Bueno, voy a averiguarlo con los tipos de Osaka. Me llama y nos reunimos de nuevo para decirme: Bueno, lo que sucedió fue que le apuntaron con una pistola, le ordenaron escribir su testamento, le inyectaron una droga para dormirle y le colgaron.

Por supuesto, no puedo escribir una historia basada en un mafioso anónimo. Yo sabía que era quien decía que era porque contraté a una agencia de detectives para que me lo confirmara. Era un jefe importante de una de las mafias más grandes. Llamé al hotel donde encontraron el cuerpo y me dijeron: Sí, bueno, el lugar donde hallaron el cuerpo no tiene un sitio para ahorcarse. ¿Correcto?

Así que llamé a la policía y le dije: Bueno, ustedes dicen que encontraron el cuerpo en la ventana pero en la ventana no hay lugar para ahorcarse. Luego la policía cambió la versión diciendo: Oh, bueno, le encontramos en el baño.

Había una celebridad de la televisión japonesa en la habitación contigua, Kumiko Mori. Ella dobla la voz de Pikachu en el Japón en… ¿dónde es? ¿En Pokemon?

KC: Ah sí. Pokemon.

BF: De cualquier manera, es muy conocida en Japón; escribió en su libro que oyó gritos y quejidos en la habitación contigua y no pudo dormir por lo que es imposible que fuera un suicidio. Eso lo confirmé con su agente.

Aparentemente le asesinaron debido a una serie de préstamos a las corporativas crediticias de Corea del Norte. Iba a reclamar los malos préstamos. De haberlo hecho hubiese descubierto una conexión secreta muy grande del partido de gobierno coreano. Los coreanos del norte han estado enviando dinero pachinko a Japón, importando anfetaminas, haciendo todo tipo de cosas, logrando que la policía ignore todo pagando enormes sobornos al partido gobernante durante años. Así…

KC: ¿Escribió sobre eso?

BF: Sí, lo escribí en Forbes.

KC: ¿Sí?

BF: Sí. Allí está. Oh, los editores tuvieron tanto miedo que editaron mucho de esa historia, aunque todavía está allí. Pueden encontrarla. De modo que empecé a hurgar más profundamente pero repentinamente Forbes comienza a presionarme.

Tenía una historia sobre G.E. por una contabilidad muy complicada que llevaba de unos billones de dólares y la eliminaron sin explicaciones. Luego, el Grupo Citi fue expulsado de Japón por lavado de dinero de la mafia. Les expulsaron. Y esa historia no fue publicada. ¿Correcto?

¡Finalmente el colmo para mí fue que una compañía de software para anti-virus le pagara a un tipo para crear un virus! Un virus para ordenadores, ¿correcto? Y le hablé al tipo que hizo el virus, ¿saben? (Es un tipo que vive en un barrio filipino pero tiene un auto nuevo de $20.000, de agencia) Me dijo: Bueno, ese tipo, el presidente de la compañía, es amigo del Sr. Forbes y ha pagado por mucha publicidad, por lo que no vamos a publicar la historia.

KC: Vaya. Así que realmente le dijeron…

BF: El editor me dijo: Sr. Fulford, tenemos problemas con los hechos.

El chequeo de datos. Ese es el ardid. El obstáculo lo elevan cada vez.
Hechos. Por ejemplo:
Usted los vio juntos en la cama. ¿Está seguro? Eso no significa que estaban haciéndose el amor. ¿Estaban cubiertos por una frazada?
No, no habia frazada
¿Bueno, realmente vio la penetración?
Bueno, no, su trasero estaba de por medio.
Ah. No sabemos con certeza. No podemos confirmarlo.

Ese es el ardid. Así es como entrenan a los medios corporativos. Crean… De todas formas, el gerente de negocios me dijo la verdadera razón.

KC: Sí.

BF: La publicidad y demás. Así que el editor me dice una cosa y el gerente de negocios me dice otra. Quedé totalmente disgustado y alienado, ¿correcto? Por lo que la calidad de mi trabajo en Forbes degeneró después de eso. Simplemente me importaba un… comino. Iba a renunciar. Me disponía a renunciar. Mm… En ese momento uno de mis libros salió en el idioma japonés y se convirtió en un éxito en ventas. Ya no necesitaba el ingreso.

KC: ¿Acerca de qué?

BF: Bueno, sólo el primero…

KC: ¿Ese no es el de Rockefeller, cierto?

BF: No, no, no. Era material publicado hacía mucho tiempo, material como el que le acabo de decir – los asesinatos y todo ese asunto que estaba sucediendo, sobre la corrupción en Japón. Muchas personas en Japón sabían que algo así estaba sucediendo. En fin, de todas formas escribí muchos éxitos editoriales como ese. Por lo tanto, tenía un ingreso independiente.

Pero lo que realmente hizo que las cosas funcionaran para mí fue cuando tomé parte en un show en la televisión, un debate con algunos de los altos políticos japoneses. Dije: ¿Son esos los tipos que gobiernan el país? ¡Por favor!!Tienen que darme una oportunidad! ¡Son tarados! (Siento tener que decirlo pero no eran de alto calibre) ¿Correcto? Me debato con ellos. ¿Qué diablos estaba sucediendo? Ahora sé que, por supuesto, son actores leyendo un guion pero en ese momento pensé: ¡Dios mío, puedo hacerlo mejor!

De repente era como… Era algo enorme. Cuando me llegó el pensamiento: Ay, Dios mío, los japoneses tienen 5 trillones de dólares en activos en el extranjero. Es suficiente dinero para acabar con la pobreza y detener la destrucción del medio ambiente – ¿pero, por qué no los usan?

Rayos, podría convertirme en un cínico alcoholizado, un pedo viejo de corresponsal extranjero, como los tantos que veo en el Club de Corresponsales Extranjeros. Sus carreras suben en espiral y después se pasan los años paseándose y volviéndose amargados y cínicos. Me dije, no, al diablo con eso. Me haré ciudadano japonés, trataré de postularme para un cargo para tratar de convencerles que usen ese dinero para salvar al mundo. Ustedes saben, eso tiene mucho más sentido.

Pero al mismo tiempo, sin embargo, yo estaba muy confundido y amargado. ¿Correcto? No estaba seguro. Habia otra parte mía que decía: Bueno, podrías escribir un libro acerca de Japón y después salir del país e irte a Hollywood para tratar de convertirte en un guionista o algo.

Habia en mi mente dos ideas conflictivas. Tenía la idea de que eso era demasiado grande y… No, no podía ser real. ¿Correcto? De modo que escribí dos capítulos que tenían los nombres y apellidos de los políticos específicos, los crímenes específicos, los mafiosos específicos. Hubiera sido una evidencia tan grande que hubiera tenido que abandonar Japón o me hubieran asesinado después de la publicación del libro.

El mismo día que le envié los dos capítulos a mi agente – en inglés – recibí una llamada de la nieta del emperador Meiji, Kaoru Nakamaru, para decirme: Usted sabe, Sr. Fulford, en realidad no debería provocar la ira de los Yakuza. Y, ¿Está seguro de que eso es lo que realmente quiere hacer? ¿No hay otra cosa que pudiera hacer en su lugar? (Me dije: ¿Por qué me está llamando esta dama? ¿Por qué en esta ocasión?)

¡Me dijo que una “diosa” la habia contactado desde el plano astral y estaba preocupada por mí! ¡Bueno, resulta ser que la “diosa” era la Policía de Seguridad Japonesa! [Ambos se ríen]

Bueno… lo que sea. Insistió en que era una diosa. Sólo una vez me dijo que fue la policía; todas las otras veces me dijo que fue una diosa. De cualquier manera, no importa. Fue lo oportuno del momento, lo que ella quiso hacer en realidad fue otra cosa.

Me di cuenta, SÍ, quiero salvar al mundo, ¿sabe? Y al contrario de tanta gente que quiere hacerlo realmente yo tenía un método concreto para esos 5 trillones de dólares. ¡Bueno… es suficiente dinero! No se puede sacar ese dinero fuera de los EEUU porque se arruinaría la economía; por lo tanto, hay que pagarles a los americanos para que lo hagan. ¿Correcto? De modo que ellos se beneficien también. De otra manera… Ustedes saben, en el pasado hubo un político japonés que amenazó con sacar ese dinero de los EEUU. Bueno, luego los EEUU se pusieron furiosos y trataron de eliminar a ese político. ¿Correcto? Así que dije, Está bien, lo haremos de tal manera que los americanos se beneficien también, así no tendrán de que quejarse.

Y ese fue el mensaje que empecé a circular. Comencé a escribir libros siguiendo esta idea: ¿Por qué los japoneses no salvan al mundo?

KC: Ajá.

BF: Sin embargo, lo que sucedió fue que la nieta del emperador Meiji me entregó el video del 9/11 y me dijo: Mire Sr. Fulford, usted conoce todo sobre la corrupción en Japón, pero no tiene idea acerca de la corrupción en el mundo. ¿Correcto?

KC: Sí.

BF: Y cuando me dio eso quedé traumatizado. Me dije: Dios mío, leí sobre eso en el New York Times. Es algo anti-semita. ¡No voy a verlo! ¿Saben? Porque todos hemos sido entrenados… anti-semita es lo mismo que nazi, que a su vez es igual a cámaras de gas. ¿Correcto? Y uno no se quiere involucrar con gente que quiere eliminar a millones de inocentes. ¿Correcto? Esa era mi manera de pensar. Porque había hecho esa asociación, ni siquiera iba a verlo.

Pero ella continuó llamándome: ¿Lo ha visto?

No, no lo he visto. Finalmente me dije: Vaya, hombre. Voy a verlo durante 10 minutos para poder decirle que lo vi. Cuando lo vi, fue como si se me hubieran caído las escamas de los ojos, como dicen en Japón. Es como…

Recuerden que fui un periodista de finanzas durante un largo tiempo y el mercado se mueve debido a que tanta gente lee lo que uno escribe. Hay un constante aluvión de gente tratando de llenarlo a uno de información basura por lo que se crea una alta inmunidad a información falsa.

KC: Sí.

BF: De modo que, supe. Eso es algo sumamente extraño porque… el problema que la mayoría de la gente tiene en los altos niveles de la sociedad occidental acerca de 9/11 es que dicen: No me importa cuanta evidencia me muestren, no hay manera sobre la tierra que el New York Times, el Washington Post, la BBC, den esa información. Porque aceptar que quien lo hizo fue una secta dentro del gobierno de los EEUU significa que la totalidad del sistema de creencias que se tiene sobre la sociedad está equivocado.

KC: Sí.

BF: Sin embargo, al haber vivido la censura de Forbes y lo que sabía acerca de la corrupción japonesa comencé a investigar para saber lo que está pasando allí. Y la respuesta es, en esencia, que la sociedad europea ya no es verdaderamente “democrática”.

Es una plutocracia combinada con la aristocracia y la “democracia”, es una especie de forma de tener controlado el sentimiento de los “borregos”, ustedes saben, para mantenerlos… dándoles la manera de ventilar sus frustraciones dentro de unos límites muy cerrados. Así… uh… hay muchas palabras diferentes que la gente usa que hace muy duro… Mucha gente tiene problemas, aún hoy en día, para creer ese asunto.

Así, lo que puedo hacer para mostrárselo, dentro de la matriz normal de los informes financieros, tipo Wall Street Journal, es como rastrearlo. ¿Sí? Lo que tiene que hacer, lo que yo hice para saberlo, es revisar la edición de Forbes de 1.918 y su primera “Lista de Ricos”. Hallará que los 10 primeros americanos más ricos controlaban el 70% del dinero del país.

KC: Sí.

BF: John Rockefeller I, estaba valorado en unos 30 billones de dólares de la moneda actual. Y creo que controlaba el 25% de toda la riqueza de los EEUU de la época. La razón por la que los Rockefeller no aparecen tan “Ricos” en la lista de Forbes era que (y recuerden que uno de mis empleos era identificar y contar el dinero de los billonarios) se les tiene como una “fundación caritativa” y de hecho, tienen cientos de ellas [fundaciones]. Rockefeller, Carnegie, Brookings, hacen toda una sopa de letras.

Con cada generación de la familia Rockefeller y de otras familias, los Morgan, que son la gente Bush y demás… Se puede ver que ellos heredan el poder. Continúan controlando el dinero. Además, tienen un sistema para que cada generación tenga una persona encargada. Por lo tanto, es una forma de aristocracia secreta. En lugar de heredar tierras, heredan activos y todos los que trabajan en esos activos son como campesinos trabajando en la finca del señor. De modo que si trabajas para Standard Oil eres en cierta manera, un siervo de Rockefeller porque ellos tienen el control absoluto.

KC: Sí. Esa es la parte que atañe a Rockefeller. ¿Del lado europeo, puede también seguirles la pista a los Rothschild?

BF: Sí. Pero lo de los Rothschild, fundamentalmente, se remonta unos 300 años. Creo que ese es un tema muy conocido pero puedo resumírselo.

El primer Rothschild que aparece se estableció en Frankfurt con un “escudo rojo” y se cambió el nombre (“red shield”…”Rothschild.” ¿Correcto?) El rey local iba a entrar en una guerra y Rothschild le dijo: Le prestaré una suma de dinero aunque si pierde no tendrá que devolvérmelo. Pero si gana, me gustaría ser su banquero.

Por supuesto, con todo ese dinero extra el rey pudo contratar muchos más soldados extras y ganó. A partir de entonces se crea la conexión entre la realeza y las finanzas – a los reyes les gusta la guerra; las guerras cuestan dinero – así se inicia el proceso de matrimonios entre esos financieros y las familias aristocráticas. Bueno, eso ha estado sucediendo durante 300 años.

Lo siguiente es: Tuvo cinco hijos que fueron enviados a diferentes sitios de Europa. Eran solamente banqueros de los reyes, al más alto nivel. Nathan Rothschild fue a Inglaterra. Se inició en la compra-venta de géneros. Pero comenzó a darse cuenta que si pudiera controlar a los productores de tintes y a los fabricantes de telas juntándolos todos, podría tener más ganancias. Así que en sus inicios exportaba telas inglesas.

Se hizo cada vez más rico y su golpe maestro lo dio durante la Batalla de Waterloo, cuando la bolsa británica… Todo el mundo se preguntaba si triunfarían los ingleses o no, ¿correcto? Pero sabían que los Rothschild obtenían la información rápidamente, más rápidamente que cualquier otra persona. Supongo que estaban involucrados con el rey en el comercio clandestino, ¿sí? porque de repente Rothschild comenzó a vender de todo, vendía todo lo que hubiera para vender; vender, vender. Y todos pensaron: Dios mío, los ingleses perdieron, los ingleses perdieron. Cosas que valían 100 se vendían por 2 o 3. Había pánico: Ay, Dios mío, vendan mientras tengan la oportunidad, de todas maneras todos vamos a ser esclavos de Napoleón.

Después cuando bajaron los precios, comenzó a comprarlo todo. Y llegaron las noticias: Los ingleses habían ganado. Así pues, lo que habia costado 100 subió a 200 pasando a controlar la mayor parte de la riqueza británica de entonces. Dijo: - esta es una famosa cita suya (no conozco las palabras exactas) “No me importa que tonto lleve la corona de Inglaterra. El que controle el dinero de Inglaterra, controla Inglaterra. Y yo controlo el dinero de Inglaterra.

Sin embargo, creo que los Rothschild eran de profundas convicciones religiosas y eran en el corazón, gente bastante decente. La razón por la que digo esto es porque a pesar de que aparentemente financiaron y organizaron la revolución americana en 1776 – con dinero de la Compañía de las Indias Orientales – también financiaron y organizaron las reformas Meiji. Y en muchas maneras fueron cosas buenas. Canadá ha sido siempre territorio Rothschild y Canadá es un país muy agradable, ¿saben?

Por lo tanto, no creo que estén en el mismo nivel. Básicamente, su sistema era el de la realeza de la antigua Babilonia. Y aquí es donde se convierte en algo extraño y esotérico y se remonta a 5.771 años.

Los Rothschild decían que eran descendientes de Nimrod, conquistador del pueblo de Babilonia –gente que cuidaba rebaños; eran pastores. Y ellos [los ancestros de los Rothschild] conquistaron al pueblo de Babilonia, hoy en día Iraq.

Decían: ¿Bueno, no habrá una manera de llevar en tropel a la gente de la manera que ustedes llevan manadas de ovejas? Y crearon el sistema. Hay que controlarles la fuente de alimentos; hay que controlar sus fuentes de información; y hay que tener una forma de violencia para disciplinarles.

Ese es el inicio de la Biblia, del Viejo Testamento, donde están las diferentes historias que el pueblo tenía y las reunieron en una sola. Esa era la única historia que el pueblo podía tener.

(Continúa en la Parte 2 y en la Parte 3)

Pinche aquí para el texto en inglés

 


Apoye el Proyecto Camelote - Haga una donación:


Las donaciones no son deducibles del impuesto para los ciudadanos americanos

Gracias por su cooperación.
Su generosidad nos permite continuar trabajando